Mañana, 2 de Febrero, se cumplen nueve años de la muerte en el Puerto de la Cruz, donde residía desde el año 1984, de la Pintora Vicki Penfold. y, dirán ustedes, ¿ qué tiene que ver una pintora en este apartado?, pues bien, en este caso por el estilo de su pintura, definido por ella y sus críticos como «figurativa y sincera». Pintura figurativa es: »  Se conoce como el arte de representar figuras que pueden ser imágenes u objetos que son totalmente reconocibles e identificables». Vemos que no son imágenes reales pero que sí podemos identificar.

Y, referido a lo figurativo, nos encontramos de lleno con el «lenguaje figurativo»: «El uso figurado del lenguaje es el uso de palabras o frases que implican un significado no explícito, que tiene un sentido alternativo».

¿Nos suena de algo?. ¡Claro!, cualquier «mitin» de los que podemos «disfrutar» de nuestros políticos actuales, se nos antojan «figurativos» y, en nada, «reales». ¿Echamos en falta el político (o cualquier orador) que nos plantee las «cosas reales» y no nos inviten a divagar nuestra mente por aquello que «debería ser o no»?. El postureo fotográfico de la publicidad de aquellas acciones que deben salir en los medios gráficos (con postura preparada y alegre si el asunto lo es y triste y severa si el momento lo requiere…,»postureo»).

¿Política «figurativa»?. ¿Para cuando la política REAL?. Esperando estamos.

Entre las palabras «milagrosas» que nos atraen a todos ( y aquí está el aspecto económico de esta pequeña reflexión) figuran las de «Subvención, ayudas, colaboración…». ¡Que fácil de pronunciar y qué tan pronto nos calan!. ¡Ponte a pedir una subvención o ayuda!. Los bancos en su atención a los mayores, tan ampliamente criticada (y con razón) son hermanitas de la caridad comparado con lo que tienes que «saber» y te exigen para «agenciarte» una subvención a la que tienes derecho. Y el trato, al bulto, nada de personalizado (que esa palabra no existe en el vocabulario de las administraciones).

Pues, ¡cuidado con los mensajes figurativos!…dardos contra nuestra razón. Si bien Vicki Penfold nos asombró con su arte, en este sentido, la aplicación a la «vida real» por la clase política, solo va en su beneficio.